Carta de los autores para los autores

Tío, últimamente estás que te sales con los posts que escribes. Sigue así.

Que sí, ya lo sé. Que me duele la cara... Que no escribo nada, jeje.
Bueno aquí tienes este comentario... :D (Que al final se ha hecho grande, ha madurado y se ha convertido en una decente señora entrada).

Que no hombre. A ver tío, estoy más liao ahora que la sandalia de un romano. Pero eso no es excusa. La buena (excusa) sería invertir tiempo en hacer algo productivo, que nos lleve un poco más allá, a los confines de los oceanos...jaja. ¿Alguna idea? Aunque lo siguiente que te puedes preguntar es, ¿Llegar a dondé? ¿A qué?
Bueno, esto es algo que nunca se sabe.

Por lo demás, me encanta cuando me preguntan, o yo mismo recuerdo, sobre algo que alguna vez escribimos en el blog. "Pues wanfry escribió una vez una entrada relacionada con eso...".

Es genial. Es poderoso. Es el mejor medio para decir al mundo, aquí estoy, soy yo, una mente pensante. Al revés que nuestra querida mierda de televisión. En lugar de mentes pensantes, están los entes no pensantes, que lo único que necesitan para ser felices es debatir sobre el color de la pamela que llevaba puesta tal o cual feminidad pupular el día de la boda de Conchita con Federico de Asís. ¿O era Francisco? A la porra la televisión.

(Digression Mode On - A.K.A. Divagation Mode On)

En general, a todos nos gusta que nos admiren, alaven, adoren por lo que decimos, por lo que hacemos, por lo que somos capaces de "crear".

La realidad en muchos casos se resume en despertarse todos los días para desayunar e irte al curro bien aseado para agradar a tus jefes(y a las jefas más :D). Luego allí, si tienes mucha suerte haces lo que no quieres hacer, pero necesitas, para cobrar un sueldo a fin de mes. En definitiva, estar sentado como un cabrón equis horas contadas al segundo delante de un monitor, haciendo tests de aceptación para una sistema web de ámbito comercial tal tal tal...

Y la verdad es que es un coñazo. No el hecho de ponerse a escribir(que muchas veces cuesta por vagueza, y no es para menos, nadie te paga por decir o contar cuatro cosas en un blog sin tener publicidad que valga y a la postre, sin que te sustente). Quizás más bien viene en consonancia con el hecho de que somos inconformistas apasionados. Nos apasiona saber, aprender, conocer, experimentar... sin límites. Somos consumidores incondicionales de información. Autodidactas en potencia.

Quiero creer que algún día seremos buenos, puede que muy buenos, en lo que haremos. Al menos es una meta más o menos alcanzable que está ahí y que resuena de vez en cuando en nuestras cabezas. No quiero verme con cuarenta años siendo esclavo de un sistema de consumo, en el que para nada importa como te ganes el pan. Lo que realmente importa es que hagas lo que quieren, como lo quieren y cuando lo quieren. Tu recompensa: vivirás una vida sin faltalte ninguna comodidad, pudiendo gastarte los euros que te demos en todas las facilidades y servicios que te ofertamos. Eso sí, ni se te ocurra, vamos, ni se te vaya a pasar por la cabeza intentar siquiera pisotearnos... que te ponemos de patitas en la calle.

Lo anterior es un tanto discutible. Habrá opiniones para todos los gustos. Qué cara he de tener para venir aquí lanzando piedras al talante de las grandes empresas que nos dan todo aquello que tenemos y que con tanta ansia queremos y necesitamos... Que cada cual piense lo que le de la gana.
Sólo puedo lamentar que la vida no sea justa para muchos... y que no venga algún listillo que me diga que eso es porque se lo merecen... que me cago en sus €!#!€?@.
La vida no es justa y punto en boca. La pena es que haya tantos y tantos que se queden en el camino en su afán por hacerse valer. Las palabras que mueven este mundo son en la mayoría de los casos, poder, ambición y dinero. ¿Qué tal si por ejemplo las cambiamos por esfuerzo, valoración y oportunidad?

Karl Marx dijo:

"La desvalorización del mundo humano crece en razón directa de la valorización del mundo de las cosas"

En conclusión. Quizás algún día llegará el esperado momento. Hasta entonces, primero la siega, luego el trillaje, y finalmente la cosecha.

Muy buenas tardes a todos.